El taxismo es el movimiento o desplazamiento direccionado de un ser vivo, o parte de él, como respuesta a la percepción de un estímulo.
Algunos seres vivos responden a un estímulo de forma automática mediante un movimiento o desplazamiento que se dirige hacia el estímulo, y otros en sentido contrario a dicho estímulo. Cuando se produce un acercamiento del ser vivo hacia el estímulo, el taxismo es positivo. Si, en cambio, el movimiento corresponde a un alejamiento del estímulo, el taxismo es negativo.
Según el origen del estímulo, los taxismos llevan un determinado prefijo: Geotaxismo (geo = tierra), Hidrotaxismo (hidro = agua), Fototaxismo (foto = luz), Gravitacismo (gravi = gravedad), Quimiotaxismo (quimio = sustancias químicas), entre otros.
Veamos algunos ejemplos:
La lombriz de tierra necesita de la tierra húmeda para vivir, por eso tiene un GEOTAXISMO POSITIVO.
Los peces tienden a vivir en el agua, ya que su sistema respiratorio le impide vivir en contacto con la atmósfera, por eso tienen un HIDROTAXISMO POSITIVO.
Las mariposas buscan constantemente la luz, por eso tienen un FOTOTAXISMO POSITIVO.
Los animales se atraen por acción de las feromonas de sexos opuestos de una misma especie, esa atracción es un QUIMIOTAXISMO POSITIVO.
(La lombriz de tierra tiene taxismo positivo)